Protesta frente al trigo transgénico: “Con nuestro pan no, con nuestras casas tampoco”
Bajo esta consigna, la “Junta Vecinal por un Ambiente Saludable” de Tandil se autoconvocó el 20 del mes pasado para expresar su disconformidad y rechazo al trigo transgénico y al acuerdo firmado el 29 de junio entre el Municipio de Tandil y las empresas Bioceres y Ortech Industries, para la instalación de una fábrica de paneles de rastrojos de trigo en el Parque Industrial.
Desde la entidad afirmaron, a través de un comunicado, que “este convenio se formalizó sin presentar estudios del impacto ambiental y refuerza un modelo que ha deteriorado nuestros suelos, contaminado nuestras aguas, nuestro aire y nuestros alimentos, generando graves problemas ambientales, sanitarios y sociales”.
Críticas al trigo transgénico
A su vez, en la misma gacetilla, argumentaron que “el trigo de Bioceres es una grave amenaza para nuestro trigo, para nuestra alimentación y para nuestra Soberanía Alimentaria, algo que en Tandil está enmascarado bajo el discurso de ser un aporte para la construcción verde. Tras 25 años de expansión de transgénicos y agrotóxicos sabemos que estos paquetes tecnológicos son veneno para nuestra mesa”
Por este motivo, desde Enfoque de Negocios nos comunicamos con Virginia Toledo Lopez, quien es Doctora en Ciencias Sociales por la Universidad de Buenos Aires, realizó una especialización en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales en Estudios Sociales Agrarios y de grado estudió la Licenciatura en Relaciones Internacionales en la UNICEN.
Además, actualmente forma parte de la junta vecinal que se formó aproximadamente en 2019, cuando algunos tandilenses se vieron afectados por las fumigaciones con agrotóxicos.
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“En particular, la junta surge en el barrio “La Porteña” cuando hay una fumigación que se da hasta el límite de la escuela – que eso fue judicializado-. Y es esa fumigación la que derivó en la actual medida cautelar que está vigente, pero no se cumple en el Municipio de Tandil”, aseguró la Doctora en Ciencias Sociales.
En relación a este episodio, Toledo Lopez destacó que en aquel entonces “se da la publicación del informe de la presencia de plaguicidas en los entornos de escuelas rurales del partido de Tandil”.
El mismo fue realizado por Graciela Canziani, perteneciente la UNICEN, en conjunto con Virginia Aparicio del INTA de Balcarce y en el mismo constataron que había 16 agrotóxicos en 15 escuelas rurales del partido. “Esto fue una prueba contundente de la amenaza a la que las infancias, en este caso, estaban siendo expuestas”, sentenció.
Por su parte, Virginia también integra el colectivo “Trigo Limpio”, mediante el cual se redactó una carta en la que se rechazaba la liberación del trigo transgénico de Bioceres en Argentina y “fue firmada por más de mil científicos en el mundo”, según advirtió.
Este trigo específico que la empresa quiere incorporar en el mercado, “es un transgénico que es inédito en el mundo… que es resistente al Glufosinato de Amonio -15 veces más tóxico que el Glifosato- “, Toledo Lopez y añadió que se encuentran consternados porque entienden que puede ser un proyecto en cubierto.
En este sentido, como junta vecinal decidieron “llamar a la conformación de una asamblea”, la cual se denominó “panazo”.
Mediante esta obtuvieron sensaciones muy positivas, “reafirmamos que la mayoría de las personas tienen mucho desconocimiento respecto de las propuestas de estas corporaciones del agronegocio, que tienen tanto impacto en la vida cotidiana de las personas… realmente no sabemos a lo que estamos siendo sometidos y sometidas, a partir de la ingesta de alimentos”.
En cuanto a lo concreto, consiguieron una audiencia con autoridades municipales. Si bien esperaban reunirse con Miguel Ángel Lunghi, el encuentro se dio con Marcela Pretantonio, Secretaria de Desarrollo Productivo y Relaciones Internacionales, y con Cristian Trevolazavala, Director de Asuntos Agropecuarios de la Secretaría de Desarrollo Productivo y Relaciones Internacionales.
“Realmente nos fuimos con los brazos vacíos porque no nos dieron acceso a la información pública que solicitamos, entonces no tenemos detalles del convenio de la carta de intención firmada por el Intendente. No nos podían dar mayores respuestas y ante determinados reclamos nos decían que ellos no eran la dependencia competente, con lo cual seguimos exigiendo la reunión con el Intendente que es el que tiene la potestad de dar de baja esta carta de intención firmada”, las sensaciones de Virginia Toledo Lopez luego de esta reunión.
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